Retos entre generaciones, en respecto a las tecnologías al uso
Desde pedir cita al médico o realizar una videoconsulta, hasta poder comprar, pasando por poder hablar con toda la familia a la vez, acudir a una reunión, o por qué no, realizar una video llamada en cualquier lugar y momento con la persona que se desee. La instauración de nuevas tecnologías en nuestra sociedad actual es un hecho que se ha implantado transformando en muy poquito tiempo los conceptos, las formas, y los medios que hasta hace poco teníamos en cuanto a vías y medios de comunicación entre otros… Toda una evolución con importantes ventajas para todos pero que, sin embargo, no termina de llegar a todos, ni de manera equitativa, ni en todos sus aspectos. Esta separación genera desigualdad en el uso y aprovechamiento, debido al propio desconocimiento, a la falta de acceso y escasez de formación sobre las diferentes utilidades que ofrece, por lo que es común encontrarnos con que la falta de información de las diversas posibilidades que nos brinda la tecnología ocasione rechazo, o pasividad, e incluso estrés para muchos, quedando apartada la capacidad que tienen para mejorar, las condiciones de vida de las personas.
Una de las inquietudes que se presentan es el hecho de adentrarse en un mundo totalmente diferente al conocido, que ha cambiado presurosamente dejando a varias generaciones en una circunstancia social ligeramente excluida. Lo que provoca un sentimiento de desfase generacional hacia las nuevas tecnologías, sumado, entre otros, a que siendo los productos tecnológicos los más publicitados son protagonizados por un sector cada vez más joven, generando un sentimiento de exclusión. Actualmente, los mayores tienen que hacer un gran esfuerzo para adaptarse. Para integrarse deben cambiar su manera de hacer las cosas, su perspectiva, y en ocasiones, hasta su forma de pensar, y presentar una actitud frente al presente proactiva y visible, ya que al sacar un mayor partido a las nuevas tecnologías son uno de los sectores que más se pueden beneficiar. Pero lo cierto es que debería ser al revés, ser la sociedad la que se adapte a cada una de las necesidades de las personas independientemente de la edad, y de las capacidades, y brindar las mismas oportunidades a todas las personas con la información, accesibilidad, y formación adecuada a cada uno, dotar precisamente al sector que más podría beneficiarse, de la formación necesaria para ello.
La tecnología es muy útil para las necesidades que podamos tener. El uso de la telefonía móvil, y de herramientas como internet, distintos servicios de mensajería instantánea etc. agilizan la comunicación y refuerzan el vínculo con el entorno, así como las plataformas de apoyo para las distintas necesidades que puedan surgir a los usuarios, favorecen la autonomía de las personas y las empodera, fomentando la independencia. La tecnología ofrece con inmediatez información sobre recursos que sirvan de apoyo en la vida diaria y en cualquier momento y lugar. Y en un futuro no muy lejano acortará muchos desplazamientos innecesarios de trámites y consultas que podrán ser gestionados desde casa y que ya, poco a poco empiezan a aumentar.
La tecnología por y para todos debe ser ya una realidad, pero resulta necesario colaborar en la unificación de la información y formación de todas las generaciones para solventar los retos que a su vez se presenten, avanzar al unísono sin dejar a ninguna atrás, y eso es responsabilidad de todos y cada uno de nosotros. Sólo con las dudas, problemas, e inquietudes de cada persona, se pueden encontrar soluciones globales para todos.
Mentes Inquietas 